viernes, 15 de abril de 2016

Ser agradecido

Desde el año pasado que no nos veíamos acá y aprovecho para saludar a todos y todas que leen mi blog. Desde la última vez que escribí pasaron muchas cosas como por ejemplo pasó la Navidad y Año Nuevo, comencé las clases y mi último año de secundaria, y fui al concierto de Coldplay al Estadio Único de la Plata el 1 de abril. La verdad estoy muy agradecido por tantas cosas y se lo agradezco a Dios. Y es eso sobre lo que voy a hablar en este artículo, ser agradecido.

“Agradecido: Se dice de aquel que muestra gratitud”

Sabes lo importante que es dar las gracias por cada gesto que se nos hace, es el pago más grande que puede haber. Cuando alguien te alcanza algo que se te cayo, cuando una persona te indica por donde tenés que ir para llegar a destino en una ciudad que fuiste por primera vez (me paso a mí en La Plata), cuando tu mama te espera con el almuerzo listo cuando volvés de la escuela, cuando los demás dejan de hacer lo que están haciendo para ayudarte a vos, cuando no sabes que responder en una prueba y tu compañero de mesa te ayuda, cuando tu mejor amigo te da un consejo, cuando ese cuando pasa tenés que siempre dar gracias. La vida misma es un hecho que debemos agradecer cada día de nuestra existencia, no lo digo de una forma drástica sin como forma de honrarla. Yo te digo y te aseguro que si implementas esto en tu vivir diario vas a comenzar a ver un cambio y te ayudara a ser más sensible con el mundo que te rodea. Hoy es un buen día para comenzar a hacerlo si es que no lo estaban haciendo, nunca es tarde. Además cuando damos gracias la otra persona siente que su gesto hacia nosotros fue vano y bueno, esto a su vez puede ser un pilar importante en convivir mejor en sociedad. Tantas cosas simples que ayudan a mejorar.

Yo te doy las gracias a vos porque tomaste un tiempo tuyo para leer mi blog, estoy agradecido a todas las personas que contribuyeron para hacer de mi este Rodrigo que soy hoy, a mis padres, hermanos, amigos, a Dios, hermanos de la Iglesia, profesores, y toda persona que conocí cuando salí a conocer el mundo cuando hice esos viajecitos a la ciudad de Buenos Aires, ¿sabes qué? Viajar te ayuda a crecer como persona porque ves que hay otras realidades y que tenés todo un mundo por recorrer.


¡Espero que este artículo te sea de ayuda. Nos vemos próximamente si Dios así lo permite!

No hay comentarios.:

Publicar un comentario